"Queridos hermanos y hermanas, con profundo dolor debo anunciar el fallecimiento de nuestro Santo Padre Francisco. A las 7:35 de esta mañana, el Obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre", escribió.
La noticia sacudió el mundo enteo, especialmente a los fieles católicos, que lamentan la partida de un pontífice que marcó una época con su cercanía, humildad y defensa de los más vulnerables.
La Santa Sede entra ahora en el período conocido como "Sede Vacante", una etapa de transición que marca el inicio del proceso para elegir un nuevo papa. Mientras tanto, se preparan los homenajes y ceremonias en honor al líder de la Iglesia Católica, quien será velado en la Basílica de San Pedro.
Qué se sabe sobre las causas de su muerte y los próximos pasos en el Vaticano
El estado de salud del pontífice se había deteriorado desde febrero pasado, cuando fue hospitalizado por una neumonía bilateral. En las semanas siguientes, sufrió crisis respiratorias, insuficiencia renal y una infección generalizada, lo que llevó a requerir transfusiones y oxígeno suplementario.
Con su fallecimiento, se inició el período conocido como Sede Vacante, una fase de transición en la que cesan las funciones del pontífice y se suspenden algunas actividades oficiales del Vaticano.
Como indica el protocolo, será destruido el Anillo del Pescador -sello oficial- para evitar el uso indebido de documentos en su nombre, y la Curia Romana también detendrá su actividad hasta la elección del nuevo pontífice.
El cuerpo de Francisco será velado durante varios días en la basílica de San Pedro, donde miles de fieles podrán despedirse. Aún no dio a conocer detalles sobre su funeral ni sobre el lugar donde será sepultado, aunque se espera que esté contemplado en su testamento.
Se prevé una ceremonia solemne con la asistencia de jefes de Estado, representantes de otras religiones y delegaciones de todo el mundo.
Mientras tanto, el Colegio Cardenalicio se prepara para el cónclave que deberá elegir a su sucesor. En los próximos días se anunciará la fecha de inicio del proceso, que se llevará a cabo en la Capilla Sixtina bajo estrictas normas de secreto.
Una Pascua marcada por la fragilidad
Pese a su frágil estado de salud, Francisco apareció en público este domingo para dar su tradicional bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la basílica de San Pedro.
En silla de ruedas y con la voz débil, saludó a los fieles con un escueto "Queridos hermanos y hermanas, buena Pascua". El gesto fue recibido con emoción y aplausos, pero también con preocupación ante la visible debilidad del pontífice. Horas más tarde, se reunió brevemente con el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, en lo que sería su último encuentro oficial.
Según fuentes oficiales, la reunión fue breve y profundamente simbólica: hablaron sobre la importancia de la diplomacia global, la paz y el papel de la religión en los conflictos contemporáneos.