Prensa.
Noticiero Digital.
El CNP calificó este lunes
al 2019 como «el año de la oscuridad y las tinieblas» debido a que el derecho a
estar informado fue cercenado por órganos de seguridad y empresas como Conatel
y Cantv.
«El año 2019 puede
calificarse como el año de la oscuridad y de las tinieblas, no solo por los
problemas eléctricos que han modificado radicalmente la vida del venezolano,
sino porque ha avanzado el silencio que desde Conatel, Cantv y la Corporación
Maneiro, mediante los distintos órganos de represión, han estado cercenando el
derecho a estar informados oportuna y verazmente, según lo establece nuestra
constitución. Entre enero y noviembre hubo 1034 ataques a la libertad de
expresión en el país durante 2019, según la ONG Espacio Público, lo que ha
terminado de sumir al país en la desinformación y en un estado de postración e
inacción», explicaron.
Reiteraron su
consternación por la manera en que grupos de civiles «se sienten envalentonados
para agredir a los periodistas que cubren la fuente parlamentaria por la
pasividad con que las fuerzas militares observan impávidas tales ataques, tal como
ocurrió el 5 de enero en las inmediaciones del Palacio Legislativo, situación
que se repitió el pasado miércoles 15 de enero, cuando algunos colegas
reportaron haber sido atacados con excretas humanas».
Advirtieron que la amenaza
de que la oscuridad se extenderá es mayor en este 2020 «con el aparente anuncio
de que la Asamblea Nacional Constituyente está preparando una nueva ley para
regular el periodismo en Venezuela, ello a espaldas del gremio. La información,
ofrecida a la prensa cubana por parte de la diputada Tania Díaz, se produce
como una cínica reacción al ataque a los periodistas antes descrita que desde
el gobierno achacaron a la oposición. Una ley de periodista preparado solo con
comunicadores afines al gobierno sería una traición al espíritu libertario de
nuestra profesión, que no debe someterse a directrices ideológicas, partidistas
ni alineadas a regímenes autoritarios y antidemocráticos. Reivindicamos la Ley
de Ejercicio de Periodismo vigente, instrumento de autorregulación de la
profesión mediante el Colegio Nacional de Periodistas y su Tribunal
Disciplinario, que antepone un código de ética alineado con los estándares
morales internacionales de buenas prácticas al momento de informar».
Por otro lado saludaron al
periodista Víctor Ugas por quedar en libertad luego de estar desaparecido
durante varios días después que el FAES «lo secuestrara por razones aún
oscuras. Igualmente, saludamos la liberación del reportero gráfico Jesús Medina
Ezaine, que estuvo en las celdas de la cárcel de Ramo Verde durante dos años,
sin que se supiera exactamente cuál había sido el supuesto delito cometido».
«El Colegio Nacional de
Periodistas reitera su posición a favor de la democracia y del respeto a las
garantías que nos ofrece la Constitución de 1999. No somos sujetos de compras
de conciencia subrepticia ni para apoyar traiciones a la voluntad popular»,
finalizaron.