Prensa. Diario El Nacional.
Después
de vencer a Argentina en Puerto La Cruz, la Vinotinto buscará sumar hoy por
primera vez en Buenos Aires
DANIEL PRAT JEREZ
El paisaje no es nuevo. El
estadio repleto de camisetas rivales que esperan una victoria cómoda. La lluvia
que amenaza. La película ha comenzado antes de igual manera y la estadística,
esa que a veces puede dar golpes duros como una mandarria, en este caso dice
que en ocho visitas a Argentina, la Vinotinto no ha podido rasguñar ni un solo
punto.
En cambio, Venezuela ha tenido
que ir a buscar la bola en su arco 38 veces en esos partidos. Una cifra
gigantesca al lado de los tres gritos de venezolanos. Un historial que
desmotivaría a más de uno pero no a esta versión de la selección venezolana.
“Siempre hay una primera vez”, ha repetido César Farías como mensaje motivador
antes del partido de esta noche en Buenos Aires (7:30 pm).
El entrenador sucrense es el capitán de un barco que zarpó en 2008 desde las
tierras conquistadas por sus antecesores Richard Páez, José Omar Pastoriza y
compañía, y que, a partir de ahí, ha seguido derribando imposibles. En 2001 las
campanas sonaron cuando la Vinotinto derrotó a Chile en Santiago, en 2004
repicaron en Uruguay durante el Centenariazo, en 2008 Brasil entró al saco al
caer en un amistoso en Boston y durante 2011, en Puerto La Cruz, quien fue a la
lona fue esta misma Argentina, la que retará hoy al combinado patrio. Poco a poco, el conjunto venezolano ha ido coleccionando barajitas por toda
Suramérica. Conquistando territorios que se pensaban inhóspitos hace años.
En 1975, durante la primera
visita de la selección venezolana a Argentina, el equipo de César Luis Menotti
le hinchó la cara al combinado criollo con un 11-0 en el que anotaron siete
jugadores diferentes. La reseña cuenta que el cuadro venezolano apenas cruzó la
mitad del campo. Los años fueron acortando la brecha, con pasos adelante y
algunos atrás. En 2004, por ejemplo, la distancia parecía acortarse cuando el
equipo que dirigía Páez perdió por un decoroso 3-2.
“No son lo que eran hace 10 años”, advirtió esta semana Javier Mascherano,
quien vivió desde adentro la derrota de su equipo en Puerto La Cruz con el gol
de Fernando Amorebieta. “No es imposible ganarles otra vez”, afirmó durante la
semana Andrés Túñez
Las casas de apuestas, por
ejemplo, siguen viendo la victoria venezolana como una sorpresa gigante. Pagan
casi 18 veces más que lo que ofrecen por una victoria argentina. Afirmar que no
será una sorpresa sería una irresponsabilidad para Farías o para cualquier otro
jugador, sin embargo, viendo la historia, tanto el entrenador como sus
futbolistas se atreven a pensar: ¿Y por que no buscar una nueva primera vez?