Prensa.
Diario el Nacional/EFE
Expertos
coinciden en que Nicolás Maduro necesita mantener la línea antiimperialista de
Hugo Chávez para asegurar votos
ALEJANDRO HIND
La decisión del Gobierno de
Venezuela de suspender el diálogo para reactivar las relaciones con Estados
Unidos obedece a la campaña para los comicios presidenciales del 14 de abril,
afirmaron especialistas. “La medida debe ser vista dentro del contexto electoral
y la necesidad de Nicolás Maduro de reunir a la base chavista. Él necesita
mostrar que es uno de ellos y tomar una línea dura es la mejor forma de
hacerlo”, dijo Michael Shifter, presidente de Diálogo Interamericano.
El ministro de Relaciones Exteriores,
Elías Jaua, anunció el miércoles que el canal de comunicación abierto en enero
para destrabar las relaciones bilaterales se suspendía en rechazo a unas
declaraciones de la Secretario de Estado adjunto de Estados Unidos para América
Latina, Roberta Jacobson, solicitando que las elecciones en Venezuela fuesen
transparentes.
La internacionalista Elsa Cardoso
también considera evidente que el recalentamiento de las relaciones con Estados
Unidos está vinculado con la campaña electoral. Recuerda que además de la
suspensión del diálogo, se produjo la expulsión de dos agregados militares
acusados de conspirar y los señalamientos de que la CIA y el FBI están detrás
de un plan para asesinar a Henrique Capriles.
Cardoso, que descarta que la
medida implique algún cambio significativo, agrega que el mensaje que el
Gobierno envía con el impasse no sólo va dirigido a los votantes del
oficialismo y a las autoridades estadounidenses. “También es una advertencia
para el resto del mundo de que cualquier juicio, opinión u observación que
ponga en duda la actuación del Consejo Nacional Electoral no será bien
recibida”.
Un portavoz del Departamento de
Estado dijo a la agencia Efe que la suspensión del diálogo es decepcionante.
Otra fuente oficial de ese país atribuyó las nuevas tensiones a la campaña
electoral y anticipó que habrá más “comentarios contra Estados Unidos que no
ayudarán a mejorar la relación”.
Reconocimiento oficial. El Ministerio de Relaciones Exteriores impuso
la Orden Francisco de Miranda, en segunda clase, a los diplomáticos Víctor
Camacaro y Orlando Montañez, expulsados por Washington en respuesta a la salida
forzada de dos agregados militares de Estados Unidos de Venezuela.
Jaua precisó que la medida
aplicada por Estados Unidos no se corresponde con el principio de reciprocidad
que rige las relaciones diplomáticas, porque la expulsión de los funcionarios
de la agregaduría aérea en Caracas obedeció “a indicios de que sus acciones
apuntaban a la desestabilización interna del país”.