Columna. Orlando Nieves.
En este 2014 quiero agradecer
primeramente a Dios, a Eduardo Galindo y a todos ustedes, que semana a semana
siguen mis escritos a través de este medio, que no es más que dar a conocer
aquellos buenos amigos cultores que día a día hacen su mejor esfuerzo por
mantener viva nuestra identidad, nuestras raíces y nuestro acervo cultural. A
todos ustedes, muchísimas gracias.
Mi primer artículo de este año
lo inicio con un buen amigo, a veces sus sueños lo transportan a mundo mágico y
en algunos momentos lo llevan hasta la utopía, lo que no se le puede negar es
que es un fiel y apasionado amante de la cultura. Nace un 8 de Septiembre de
1.978 en la ciudad de San Fernando Estado Apure, Venezuela, en el seno de una
familia modesta, es el tercero de tres hermanos. Su gusto por la música fue el
germen para aventurarse con pasión en las Artes Escénicas: En el mundo Coral,
perteneció a la “Coral Polifónica Cuamense Raimundo Pereira; la Poesía Lírica y
Costumbrista; el Teatro, en el Ateneo de Calabozo Estado Guárico; y la Danza
Folklórica con la Fundación Paleros de San Martín de la Parroquia El Recreo
Estado Apure.
Ésta última disciplina
artística, le ha dado tantas experiencias como satisfacciones personales,
compartidas literalmente en el escenario con su esposa Mirla Castellanos y sus
dos pequeños hijos: Venezuela y Alberto José, con quienes baila y a quienes les
ha inculcado el amor por las Artes en sus distintas manifestaciones. “Artista
por testarudo……” “A veces no sé si vivo para cantar, o canto para vivir…….” Soy
el amigo, el compañero, el hombre, el padre, el esposo, el soñador, “el
testarudo”, el Intérprete.
He sabido reinventarme,
redescubrirme como Artista, paseándome en el canto por el Joropo recio y
romántico, hasta la Ranchera Lírica en una demostración de pasión y
versatilidad en el plano musical. Soy un soñador que piensa en las artes como
modus vivendi, como forma de vida, es así que como Maestro de primeras letras
enseño, predico, critico y acciono. “El límite está en la mente más que en
cualquier parte” “Hay que soñar y luchar para que los sueños se hagan
realidad”. Algo que disfruto cuando estoy en la intimidad de mi hogar es
aprender a través de documentales. Son una joya del séptimo arte.
Soy un venezolano que sueña con
que el crecimiento del País pasa en principio por el desarrollo de las Artes.
Mi sueño no logrado, ser Flautista, pero he convertido mi garganta en la flauta
que nunca tuve. En la actualidad Alberto ya no se encuentra entre nosotros y
hoy no podemos disfrutar de sus show de música ranchera. Quienes tuvimos la
grata satisfacción de estar a su lado en esos momentos musicales de jovialidad
y de trabajo, debo decir que fue una experiencia muy grata al lado de este buen
amigo. Hoy está fuera de nuestras tierras porque el destino así lo quiso y le
deseamos el mayor de los éxitos al lado de su familia. Esperamos tenerlo pronto
en Apure si Dios así lo quiere. ¡Éxitos por siempre buen amigo..!