Prensa. EFE.
El intérprete de
películas como En busca del destino y Papá por siempre sufría de depresión. La
policía sospecha de suicidio
HUMBERTO SÁNCHEZ
AMAYA HSANCHEZ@EL-NACIONAL.COM
Poco
antes del mediodía de ayer en el condado de Marin, California, el centro de
llamadas de emergencia de la localidad recibió una alerta sobre un hombre
inconsciente que no respiraba dentro de su residencia. La persona fue
identificada como Robin McLaurin Williams, de 63 años de edad.
Ese
era el nombre completo del popular actor conocido por películas como Jumanji,
Patch Adams y El hombre bicentenario que fue visto con vida por última vez el
domingo en la mañana, en la residencia que compartía con su esposa, Susan
Schneider. Según el reporte policial, se sospecha de suicidio por asfixia.
“Esta
mañana perdí a mi esposo y mi mejor amigo, al mismo tiempo que el mundo se
quedó sin uno de sus más amados artistas y un bello ser humano. Tengo el
corazón roto. Pedimos privacidad durante este tiempo”, declaró la esposa a The
Hollywood Reporter.
Su
agente, Mara Buxbaum, indicó al mismo medio que Williams luchaba contra una
depresión profunda desde hace tiempo. En julio el intérprete había estado en un
centro de rehabilitación para superar adicciones y controlar la ansiedad. Su
último tweet lo escribió el 31 de julio para publicar una foto con su hija, que
cumplía 25 años de edad.
En
1998 ganó el Oscar como Mejor Actor Secundario por En busca del destino, del
director Gus van Sant, protagonizada por Matt Damon. Según la página de IMDB,
se encontraba filmando la próxima entrega de la saga Una noche en el museo y
estaba previsto que participara en la segunda parte de Papá por siempre, uno de
sus filmes más populares de los años noventa.